La complejidad de hablar un mismo idioma y no saber cómo comunicarnos: el escaso entendimiento regional.

por ARIELA LIJAVETZKY, Est. en Ciencias de la Educación de la U. Buenos Aires. Directora del Departamento de Educación No Formal de la OHA Macabi. 

Cuenta la Torá que la humanidad hablaba un mismo idioma. La comunicación era sencilla, el entendimiento mutuo casi perfecto. Tan es así, que un grupo de constructores tomó la decisión de construir una alta torre para alcanzar el cielo y establecerse cerca del trono de D´s. Gran error parecen haber cometido al pretender acercarse al Eterno, quien decidió darles una lección para que siempre tengan en cuenta que como El, no hay nadie. ¿Y qué hizo? Generó malentendidos, confusiones, hechos que impidieron que la obra se lleve a cabo, y generaron que este grupo de hombres se disperse por distintas zonas. ¿Y cómo lo hizo? Otorgándole a cada uno un idioma diferente. Eso fue todo. Sin un idioma común, no habría entendimiento, no había cohesión.

¿Pero podemos realmente otorgarle tremenda responsabilidad a nuestra lengua? Si toda la humanidad hubiese continuado hablando un mismo idioma, ¿sería distinto el mundo de hoy? definitivamente no.

Analicemos lo que sucede en América Latina. Diecinueve países del continente tienen entre sus  lenguas oficiales el español o castellano. Alrededor de quinientos millones de personas en el mundo lo hablan como primera o segunda lengua. Tras el chino mandarín, es la lengua más hablada del mundo por el número de personas que la tienen como lengua materna. A su vez, la diversidad idiomática americana es tal, que algunos autores estiman que este continente es el mas fragmentado lingüísticamente, con alrededor de 123 familias de lenguas, muchas de las cuales poseen a su vez decenas o incluso cientos de lenguas y dialectos.

Algunas de las lenguas indígenas importantes por su número de hablantes o por su aporte al español son el nahuatl, el taino, el maya, el quechua, el aimara, el guaraní y el mapuche, por citar algunas. Existe una Ley General de Derechos Lingüísticos de los Pueblos Indígenas que contempla el reconocimiento de los derechos tanto individuales como colectivos de las personas y pueblos que poseen y practican, alguno de los lenguajes indígenas como lengua materna. Además especifica nociones como lo que debe comprenderse por lenguas indígenas y lenguas nacionales, las condiciones de aplicación del decreto, y los atributos, propósitos y funciones del Instituto Nacional de las Lenguas Indígenas.

En Latinoamérica, el idioma español tiene variantes o dialectos en las diferentes zonas donde es hablado a raíz de la enormidad del territorio, como también de las diferencias históricas. Es posible observar el desarrollo de las diferentes variantes de español latinoamericano en las diversas áreas geográficas.

Aún así, se trata de uno de los idiomas oficiales también en varias de las principales organizaciones político-económicas internacionales: UE, UA, OEA, OEI, TLCAN, Unasur, Caricom, y el Tratado Antártico, entre otras. Y por supuesto es idioma oficial en las alianzas y organizaciones establecidas entre países de America Latina.

Los cuatro Estados Partes que conforman el MERCOSUR (Brasil, Paraguay, Uruguay y Argentina) comparten una comunión de valores que encuentra expresión en la declaración de búsqueda de sociedades democráticas, pluralistas, defensoras de las libertades fundamentales de los derechos humanos, de la protección del medio ambiente y del desarrollo sustentable, así como su compromiso con la consolidación de la democracia, la seguridad jurídica, el combate de la pobreza y el desarrollo económico y social con equidad.

El BID (Banco Interamericano de Desarrollo) es la principal fuente de financiamiento multilateral para el desarrollo económico e institucional sostenible de América Latina y el Caribe. El Grupo BID está integrado por el Banco Interamericano de Desarrollo, la Corporación Interamericana de Inversiones (CII) y el Fondo Multilateral de Inversiones (Fomin). El Banco ayuda a sus países miembros prestatarios a formular políticas de desarrollo y proporciona asistencia técnica y financiamiento para incentivar el crecimiento económico sostenible que al BID le interese generar, reforzando la competitividad y fomentando el libre comercio y la integración regional (o dependencia).

El ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América) es el «espacio de encuentro de los pueblos y gobiernos que entienden que la América Latina Caribeña conforma una Gran Nación, que sus países deben unirse para enfrentar conjuntamente los desafíos del presente y del futuro». Los países miembros del ALBA son la República Bolivariana de Venezuela, la República de Cuba, la República de Bolivia, la República de Nicaragua y la Mancomunidad de Dominica, la República de Honduras, la República de Ecuador, San Vicente y las Granadinas y Antigua y Barbuda. Los TCP, tratados de comercio de los pueblos, son tratados de intercambio de bienes y servicios para satisfacer las necesidades de los pueblos.

La Comisión Económica para América Latina (CEPAL) fue establecida por la resolución 106 (VI) del Consejo Económico y Social (Naciones Unidas), del 25 de febrero de 1948. Es una de las cinco comisiones regionales de la ONU y su sede está en Santiago de Chile. Se fundó para contribuir al desarrollo económico de América Latina, coordinar las acciones encaminadas a su promoción y reforzar las relaciones económicas de los países entre sí y con las demás naciones del mundo. Posteriormente, su labor se amplió a los países del Caribe y se incorporó el objetivo de promover el desarrollo social.

Estos son solo algunos ejemplos de organizaciones internacionales entre los países de America Latina, y uno podría pensar que se trata de un continente con un alto rendimiento internacional y aprovechamiento de relaciones de intercambio entre países miembros.
Sin embargo, ¿cuándo se ha escuchado que a través de las rutas del MERCOSUR circulen donaciones (y no tráfico) de órganos vitales, o bien que entre las acciones del BID se lleven a cabo planes de vivienda para la gran cantidad de personas sin hogar, o tal vez que ALBA se ocupe de intercambiar proyectos de recuperación social, o la CEPAL funcione como ente regulador de las deudas externas que posee cada uno de sus países miembro?

Lamentablemente, la respuesta es no a todo lo anterior. Es una pena que la ventaja de hablar un mismo idioma únicamente se utilice para comprender las desgracias mencionadas en los medios de comunicación y comparar cuál de los países del “tercer mundo” está más cerca de subir un escalón. Pero sino miramos para abajo y nos aseguramos de que la base esté firme, nunca podremos avanzar en los peldaños.

¿Y si no hubiera existido una Torre de Babel? En hebreo Babel (“bl-bl”) significa balbuceo, confusión al expresarse algo. America Latina está sufriendo una gran confusión de expresión y acción, aún hablando el mismo idioma.

 

Referencias

http://www.mercosur.int/t_generic.jsp?contentid=655&site=1

http://www.reingex.com/America-Acuerdos-Integracion.shtml

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Un comentario

  1. Gracias Ariela por dejarnos pensando y reflexionando. ¿Qué es lo que cada uno puedo comunicar? Lo hacemos? Nos comunicamos? o solo nos decimos «amigos» porque así lo declara el programa… «es casi la mejor palabra del mundo…»
    Creo que estamos quitandole mucho valor y significado a nuestras palabras, nuestro idioma, el lenguaje humano que en su mayor porcentaje, comunica con el cuerpo, lo estamos perdiendo gracias a las «caritas» que nos facilitan las expresiones, o el «jajajja».
    A seguir pensando, hablando, y abrazandonos!!!!

    Gracias otra vez.
    Soy tu fan, seguí escribiendo.
    Pamela Scolnic

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