Me duele… el skate, mi pasión y mis lesiones

por JOSE TOMAS HIRSCH, Est. Derecho, U. de Chile.

 

Tenía catorce años la primera vez que vi andar a Juan Carlos Aliste, el “niño goma”, una de las promesas del skate nacional. Ese día sentí como cambiaron en mi cabeza los límites de lo que era posible hacer sobre la tabla, y fue así como sin saberlo el “niño goma” me introdujo en lo que se convertiría más adelante en mi pasión más intensa. Por primera vez había encontrado algo que realmente me gustaba y en lo que me quería destacar; soñaba con algún día andar como los profesionales.

En marzo del 2012, a los diecinueve años, había alcanzado un buen nivel, pero un día decidí ir más lejos y hacer un “flip” sobre ocho escaleras. Estaba agarrando el truco pero soltaba la tabla antes de caer, hasta que caí con la tabla pero con el pie izquierdo un poquito afuera y se me dobló, y me rompí el quinto metatarso y uno de mis ligamentos. Después de dos meses de kinesiología volví a patinar, pero el primer día que me subí a la tabla me aceleré demasiado, traté de saltar ocho escaleras sin siquiera calentar y fue así como me rompí dos dedos del mismo pié y me hice un hematoma, lo cual me condujo a más kinesiología y un mes más sin andar.

En agosto volví a subirme a la tabla, y patiné más de un mes sin lesionarme. Estaba alegre y pensaba que todo había terminado, hasta que haciendo un truco básico me caí hacia atrás y me rompí la mano derecha, donde ahora tengo cuatro tornillos. Como si fuera poco, en diciembre del año pasado me rompí el menisco de mi rodilla derecha jugando futbol, y me tuve que operar de nuevo.

En marzo retomé el deporte, pero era otro. Estaba más tranquilo, me exigía menos, y logré andar de corrido dos meses hasta que en Mayo me produje un esguince en mi tobillo izquierdo de nuevo haciendo un “flip” sobre cuatro escaleras, un truco que hacía todos los días en el Parque de los Reyes. Fue ahí cuando toqué fondo, no podía creer mi suerte y mientras manejaba a mi casa con el pie lesionado me puse a llorar, no de dolor, sino de pena.

Estuve una semana en cama en la que nadie entraba a mi pieza, perdí el apetito, y en ese mes que estuve lesionado bajé cinco kilos. Cuando mi papá me llevó a la clínica me había dado por vencido; mientras me decía que este deporte era una pérdida de tiempo, que tenía que estudiar más y conseguir una polola, lo acepté como una verdad absoluta; asumí que el skate no era lo mío y sentí como mi mundo se llenaba de incertidumbre.

Fui a un traumatólogo que me recomendó un amigo, le conté mi situación y le dije que me aconsejara: estaba listo para dejar de patinar si él me lo decía. Sin embargo, me alentó para que siguiera, me dio unos ejercicios y una tobillera que era lo último en medicina deportiva.

Fue así como volví a patinar, con tranquilidad, hasta que uno de los primeros días de junio decidí empujarme nuevamente. Fui al Parque O’Higgins decidido a deslizar un pasamanos que está por encima de nueve escalones, un truco mucho más grande y peligroso de lo que acostumbro hacer. Me demoré por lo menos media hora en “aperrar” y subirme al fierro, mis tobillos se sentían de jalea, me temblaban las piernas y tenía un miedo que hasta entonces desconocía.

Después de pelear contra el truco una hora, logré caerlo y casi todos los que estaban en el skatepark me celebraron; vieron todo el esfuerzo que me tomó, pero lo que no sabían cuando me abrazaban era que solté una lágrima, tan insignificante que pudo haber sido producto de los nervios o de algo que se me había metido al ojo; pero no, era una lágrima de alegría.

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3 comentarios

  1. Te felicito loco yo muchas veces pienso en dejar andar,ya tengo una luxacion, rotura de el metacarpiano y no me imagino por lo que pasaste vos!.No cualquiera después de todas esas guerras vuelve a andar, sumado a eso la presión de tus padres.Sos un genio!!.A seguir dándole nomas!.

  2. Va a sonar un poco deprimente, pero ahora mismo necesito contarlo (aún sabiendo que nadie lo leerá ya que esto fue subido hace 8 años). Yo hace unos meses comencé a patinar en skate. No se me da muy bien ya que soy principiante. Apenas puedo avanzar y poco más. Hace poco de un mes con la presión que sentía de mis amigos, sin practicar ni nada, decidí bajar una rampa. Fue el peor hecho que pude hacer. Me caí y sentí como casi vomitaba al momento. No me podía levantar y sentía como se reían de mí. Me llevaron a que me sentara y dijeron que solo sería un esguince. Perdí la visión, no veía casi nada. Decidí llamar a mis padres ya que no me tomaban enserio. Cuando llegaron, de camino al coche vomite y perdí la visión de nuevo. Cuando llegue al hospital, efectivamente me había roto dos huesos. Cogí un trauma terrible, no quería saber nada que tuviera que ver con un skate. Llegue hasta dejar de ver un anime porque trataba de skaters.Me llegué a prometer que no volvería a montar. Hace un mes que me sucedió y ahora estoy haciendo rehabilitación para volver a andar. Estos días en cama me salió un video de skate, y la verdad estuve HORAS mirando videos. La verdad esque si quiero aprender pero me da miedo el no poder conseguirlo o no tener suficiente talento para hacerlo. Nose mucho por donde empezar pero espero algún día aprender. La verdad tengo miedo al rechazo y el que se burlen de mi también.

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