Veida Centenario Hashomer Hatzair

por GABRIEL CARVALLO,  Boguer Shnat Hashomer Hatzair 2013.

 

Para hablar de tnua (movimiento juvenil) podemos situarnos en un amplio espectro de temáticas que nos llevan desde la esencia rebelde juvenil que la hizo nacer, y que la ha mantenido con vida todos estos años, o podríamos hablar de la influencia que han llegado a tener y que tienen  dentro de la comunidad judía y no judía a lo largo del tiempo, siendo éstas fundamentales a la hora sucesos como la creación del Estado de Israel, la resistencia en los ghettos o diferentes manifestaciones sociales y culturales en las sociedades locales en la que cada tnua se desenvuelve.

Hashomer Hatzair, dentro de este amplio espectro de temáticas para analizar, se establece como un ente fundamental dentro de la historia moderna del pueblo judío, teniendo momentos de profunda influencia dentro del activismo político local, y caracterizándose siempre por una crítica constante a la sociedad capitalista y sobre cómo ésta afecta al individuo y a la vida en comunidad.

Uno de los desafíos fundamentales que ha mantenido Hashomer a lo largo de sus 100 años de historia, es mantener la perspectiva crítica de la sociedad sin caer en slogans sin fondo o en un activismo poco significativo, y es por lo mismo que la revisión constante de la ideología del movimiento se ha hecho necesaria en múltiples oportunidades a lo largo de su historia.

Desde la caída de la alia y la supuesta muerte del movimiento kibbutziano, se ha realizado un largo proceso de revisión ideológica que pasa por una importante modificación de los pilares y de la hagshama en la veida Holit del 2008 en la que se amplió el paradigma, desplazando a la alia al kibutz como única realización y situándola como la máxima expresión realizadora, pero no como la única.

Este importante proceso incluyó la veida mundial de los 100 años hecha el pasado mes en Guivat Haviva, en la que la autonomía juvenil y el activismo fueron comprendidos como aspectos fundamentales para la vida tnuati, por lo que se situaron en el centro de la discusión que reunió durante tres días a javerim de todo el mundo.

Da para analizar los pro y contra del resultado final de los documentos. Muy criticable es la perspectiva en cierto punto reaccionaria que adquiere el movimiento en ciertos aspectos, o la validación de los actos de caridad como recurso jinuji, pero lo más importante de discutir es la perspectiva de universalidad que está recuperando el movimiento, el avance en la comprensión de la importancia de Hashomer Hatzair en cada comunidad local en la que se encuentra y el rol que adquiere la juventud autónoma en estos procesos.

Hashomer Hatzair es una visión de mundo. Pertenecer a este movimiento es plantear una alternativa a la sociedad. No reconocer lo fundamental del Hashomer en el proceso revolucionario es un error que corta las alas del movimiento, y es un error que, en parte, está remendando a partir de las últimas veidot. La perspectiva crítica y reflexiva que otorga Hashomer Hatzair a la realidad es única y se tiene que hacer ver dentro del cambio social.

¿Quién más si no Hashomer podría hacerlo? existen pocas tnuot que plantean un sionismo socialista y una perspectiva del conflicto más crítica, o que podrían generar un cambio en los paradigmas educativos de la sociedad entera.

Esta veida es un gran avance en pos de la recuperación de nuestro movimiento a nivel mundial y nos plantea el importante desafío de la creación de nexos con otros entes de la comunidad judía y no judía, para crear fuerzas  que logren generar el cambio que nos llevamos planteando a lo largo de estos años.

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