Al que vive por inercia

por DANIELA BITRAN, Est. Psicología, PU. Católica.

Estimado:

Quiero tener un departamento donde viva sola y decorarlo como yo quiera, que todo sea en versión linda, como una escoba con lunares, pero también en estilo bajo presupuesto, con un velador de libros apilados.

Quiero verme todas las películas que han sido nominadas al Oscar en la historia de los premios Oscar.

Quiero hacer el cliché de agarrar un globo terráqueo, hacerlo girar, frenarlo con el dedo aleatoriamente, e irme a ese lugar (pero en realidad volver a hacerlo porque el primer lugar no me gustó).

Quiero tatuarme los brazos enteros, no pensarlo tanto, andar como yo quiera.

Quiero ir a un asilo de ancianos, hacerme amiga con un viejo solitario e ir a visitarlo todas las semanas, hasta que muera.

Quiero seguir viajando,

Quiero volver.

Quiero tener un hijo y sentir que es el amor de mi vida.

Quiero leerme el libro favorito de todas mis personas favoritas.

Quiero trabajar de mesera en un restaurant, sonreír para tener más propina y que haya un cliente que sólo vaya para verme, sin que yo lo sepa nunca.

Quiero ser exitosa, ganar mucha plata y comprarme zapatos caros.

Quiero terminar los cuadros a medio pintar que guardo en mi closet, y empezar otros dejándolos sin acabar.

Quiero comer cereales con leche, remojados hasta que queden blandos.

Quiero llegar a vieja y vestirme como hippie.

Quiero ver a Coldplay en concierto.

Quiero toparme con una escena violenta en la calle y meterme a defender a la victima.
Quiero cocinar, antes de aprender a hacerlo.

Quiero enamorarme,
Quiero seguir burlándome del amor.

Quiero cortarme el pelo, aburrirme a la semana y llorar como una niña.

Quiero invitar a cenar a mis padres a mi propia casa.
Quiero quedarme una tarde entera conversando con un extraño, y una noche entera conversando conmigo misma.

Quiero discutir, pelear y gritar,
Quiero meterme a algún movimiento por la paz mundial.

Quiero tener hijos y que sus amigos piensen que tiene suerte de que yo sea su mamá.

Quiero encontrarme a alguien leyendo el mismo libro que yo, hablarle y tener un breve e intenso romance.

Quiero soñar esta noche, darme cuenta que estoy soñando, sacarme toda la ropa y volar.

Quiero tanto

y no se puede;

Y no es sólo tiempo lo que me hace falta, es que son vidas! Quiero tener muchas y no tengo más que una.

Por eso acudo a usted. Y espero no ser malentendida, lo hago de manera muy cordial y respetuosa, para pedirle que me preste la suya. No es de egoísta, para nada, es más, siento que es beneficioso para ambos… yo a cambio le puedo dar mis muñecas viejas, mi paraguas o incluso mi auto, que son elementos que al igual que usted con su vida, tampoco parezco estar usando.