Derechos LGBT en Argentina: la otra cara de la cordillera

por VIVIANA CASTILLO, Colaboradora Hod Chile: Judíos por la Diversidad.

Cuando pienso en la situación que viven las parejas homosexuales  en Chile, no puedo evitar compararnos con la realidad actual de nuestros vecinos. En Argentina, desde hace un par de años está legalmente aprobado y aceptado el matrimonio entre personas del mismo sexo, lo que no solo implica un reconocimiento social para esa pareja, sino que además una cantidad creciente de beneficios legales para ambos integrantes y sus hijos.

Entre los últimos aprobados durante el año 2012 podemos destacar el derecho a darles los apellidos de la pareja a los hijos, sin tener impedimentos de parte del  padre  o la madre natural. Independiente de cómo haya sido concebido este niño, ya sea de manera tradicional, o mediante la compra de espermas y su posterior fertilización asistida, o gracias a la adopción, este niño no está obligado a cargar de por vida con el apellido de un padre o una madre que no lo criará.

Si todo esto nos deja sorprendidos y con una cuota de envidia, agregaré un dato más. Además de todo lo mencionado, en Argentina, las parejas homosexuales casadas tienen el derecho a una subvención de parte del estado en caso que opten por la fertilización asistida. En definitiva, los derechos y beneficios legales con los que cuentan nuestros vecinos homosexuales son muchos y van en aumento.

En Chile, a nivel político, e incluso en las noticias diarias, han evitado hablar de esta nueva y moderna Argentina. Cada vez que en nuestra sociedad se exige regularizar la situación de las parejas estables homosexuales, nos dicen que se está intentando aprobar el AVP (Acuerdo de Vida en Pareja), pero no está en discusión el tema del Matrimonio Igualitario, y apuntan a comparar una posible futura situación de regularización con la realidad de países tan lejanos como Francia y Alemania.

¿Qué tiene en común Chile con esos dos países europeos? Nada, sólo lo hacen para ganar tiempo, aprovechándose de la ignorancia de la gente. Si quieren compararnos con Francia y Alemania, que empiecen por comparar los sueldos mínimos, los sistemas de salud, los sistemas de educación pública. Por lo tanto, la comparación no será nada conveniente para nuestros políticos, a menos que quieran más personas exigiendo sus derechos sociales, más marchas y más huelgas.

¿Por qué en Chile se ha evitado mostrar la realidad actual de Argentina? simplemente porque si la gran mayoría de la población chilena estuviese en conocimiento de todos los derechos que han sido aprobados a favor de la comunidad homosexual, siendo esto una realidad tan cercana a nosotros, sería factible e inevitable exigir lo mismo para nosotros. No podrían negarnos estos derechos, puesto que ambos son países Latinoamericanos, del Cono Sur, ambos tenemos un mismo idioma, tenemos una sociedad, una cultura y un sistema político similar, etc.

¿Cuánto tiempo falta para que nuestros políticos decidan entregarle igualdad de derechos a la población homosexual, la cual tiene los mismos deberes que la población heterosexual? Como ciudadanos chilenos, estamos siendo burlados y engañados por todos y cada uno de los políticos. Nos han mantenido ignorantes, nos bombardean con farándula para evitar que nos informemos de lo que hoy sucede al otro lado de la cordillera. Finalmente, todo depende de nosotros, ya no es suficiente el voto, sino que también debemos ser capaces de exigirles a los políticos que cumplan con sus promesas de campaña.