The Chilean Way: el pobre de la OCDE

por DEBORAH NAVARRO-ROSENBLATT, Nutricionista, U. de Chile. MSc en Salud Pública mención Nutrición, U. of London, Inglaterra.

Desde el año 2010, Chile es miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Los 34 países miembro de la OECD tienen como objetivo coordinar políticas sociales y económicas y hacer intercambio de estas. La OECD también es conocida como el ‘Club de los Países Ricos’ (1).

Con el precio del cobre, principal fuente de exportación de Chile, estable y alto durante los últimos años, no es de extrañar que Chile se haya posicionado como la economía más estable de la región.

Teniendo en cuenta el nivel de corrupción de nuestros vecinos, obviamente Chile se ha presentado como ‘la’ opción para invertir en Latinoamérica, además del respeto por la inversión económica extranjera. Lo anterior junto al precio estable del cobre, han plasmado a Chile dentro del ‘podio’ que reúne a los países de alto nivel económico.

Así es como desde julio de este año, el Banco Mundial clasifica a Chile dentro de la categoría alto ingreso económico. Si bien Chile ha tenido un historial de crecimiento sostenido en las últimas décadas en temas relacionados a indicadores de salud, indicadores de pobreza, indicadores de educación e indicadores económicos, estos son, solo indicadores.

Los indicadores usan como medidas de evaluación las tasas, coeficientes que expresan la asociación entre cantidad  y la frecuencia de un caso específico. Es decir, no es representativo de toda la población, sino similar a lo que podríamos llamar promedio.

El Banco Mundial no toma en cuenta factores como la brecha entre los más ricos y los más pobres, teniendo Chile el 20% superior de la escala de ingresos ganando 12 veces lo que recibe la población que ocupa el 20% inferior. Tampoco está incluido el índice laboral hombre/mujer, teniendo en Chile cerca del 74% de los hombres con empleo remunerado, en comparación con el 49% de las mujeres. En Chile, en promedio, se trabaja 2047 horas al año, en comparación a las 1776 horas que se trabajan en promedio en los países miembros del OCDE (2).

El hecho que Chile sea catalogado como país de alto ingreso económico, no solo es una burla al 80% de los chilenos y un masaje al ego a un grupo limitado de familias, sino que también nos afecta de manera indirecta.

Como resultado, desde ahora Chile y los chilenos ya no podrán postular a financiamiento de proyectos de investigación entregado por ONGs, como the Gates Foundation, Ford Fundation, the Wellcome Trust, entre otras, ya que ahora somos ‘grandes’.

Pero a los señores de la OCDE se les olvidó medir la distribución de la riqueza en Chile: no se ha tomado en cuenta el Coeficiente Gini, el que mide la pobreza no como promedio de una ecuación, sino que incluye la distribución de la riqueza, o del mismo modo, la distribución de la pobreza de cada país.

Nótese que si se usa el Coeficiente Gini, Chile tiene un índice de desigualdad de 52.06% (3) (siendo 0% igualdad perfecta y 100% desigualdad perfecta). Si comparamos Chile con nuestros vecinos de Latinoamérica como Perú (48.14%), Uruguay (45.32%) o Ecuador (49.26%) (4), Chile deja mucho que desear. Ni hablar de los países nórdicos.

La verdad es que me da vergüenza mencionar lo siguiente, pero como mujer es mi deber: Chile está número 91 del mundo en desigualdad de género (5). Nuestra peor característica es la falta de mujeres en posiciones de liderazgo y jefaturas de alto rango (entiéndase como gerentes, directoras, jefas en general). Es difícil encontrar una carrera en dónde haya menos del 50% de mujeres, ¿cuántas de estas llegarán a cargos altos?

Chile ha caído en la maldición de los países ricos, ahora nadie nos ayudará, somos grandes, nos tendremos que hacer cargo nosotros mismos de arreglar este país. ¿Seremos capaces de hacerlo?

1. http://www.oecd.org/

2. http://www.oecdbetterlifeindex.org/es/countries/chile-es/

3. http://www.quandl.com/chile

4. http://www.quandl.com/demography/gini-index-all-countries

5. http://reports.weforum.org/global-gender-gap-report-2013/

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