RAW

por AMIT KNUST, Est. Psicología, U. del Desarrollo. Dj.

Confundo tu cabello, con telas de araña. El deseo es una trampa, dura poco, como un coco cayendo de la palmera. La intensidad de la soledad un día de verano, me pone en una posición mental que amenaza mi integridad, la melancolía es su pistola, una máscara este relato.

Puedo excusar mis trastornos a través del arte, una fugaz conversación sobre lo que más te gusta. ¿Quieres saber cómo piensan los artistas? Me presionan los sonidos, que al igual que mi persona, tienen sombra ante la luz. Las corporaciones van a pagar por tu personalidad, no hagas un paquete con tu alma dentro, dejarás triste a tu cuerpo.

La forma no tiene método, tiene secreto. Los días y las noches son un misterio, en la jungla Jungiana. Y no es que robe sus ideas, pero condeno de ladrón al hombre, ese sediento de control, el que se pasea el examen de grado, el que destruye su talento perdiéndose en Facebook, el que desnuda su privacidad ante 1500 amigos virtuales. Internet me aleja de ti, beso un espejo por no querer seducirte por Whatsapp, menos mal que la vanidad se queda en mi baño, porque si no estaría en el psiquiátrico de Av. La paz.

Suicida tu ego, los caballos solo existen en tu mente. La mediocridad es un hábito que construyes con tu inconsciente, por eso los nazis cerraron el Louvre en el 40’. El prejuicio es el espejito que guardas en tu cartera, el diccionario de los ignorantes escrito por dos ciegos en MDMA.

Me hierve la sangre, el viento es mi prozac, la música y yo, yo y la música. ¿Se supone que me entiendas? Si a veces ni siquiera te entiendes a ti. No quiero querer este eco prohibido, esos pensamientos calculados, que se deslizarán por tu cuerpo, con un hielo en mi lengua. Una roca cubierta en seda, dame eso que solo yo puedo sacar contigo.

Prostituir el destino por la flojera no tiene sentido. Volver a pololear a los sesenta no suena tan mal como gay arrepentido. Estos versos intrépidos alumbran mis miedos, puedo ver mi dolor en un incendio, el éxtasis de conectar las coincidencias, hacer catarsis a tu lado comiendo Nutella.

Que fácil tocarte, que difícil amarte. El vino va y viene, la marea sostiene la salud de los peces, así como la compañía sostiene la de los humanos. Los remedios, fueron el primer día la forma mas fácil de morir, hoy viven destruyendo tu renacimiento. Freud patentó que la ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como lo son unas pocas palabras bondadosas… cuanta fortuna.

Soy el dueño de mis pensamientos y esclavo de mis palabras. – dijo el sirviente a la hija del rey.

No te veo afligido por que llegue mi viejo y nos pille en tu pieza wn… –comentó ella. No estamos haciendo nada de malo Su majestad. – impuso el fiel sirviente.

Viólame…   (susurro acercándose tan rápido como pudo a el).

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