Ausencia de Democracia… ¿sólo en Venezuela?

por DANIEL TOPAZ, Psicólogo, U. Diego Portales.

 

A 15 años del comienzo de la “Revolución Bolivariana”, y a un año del fallecimiento del líder de dicho proceso Hugo Chávez, la situación política venezolana se ha vuelto a tornar inestable. La violencia callejera, con sicarios motorizados asesinando civiles y fuerzas de seguridad proclives al gobierno, es sólo parte de la estrategia llevada a cabo para desastibilizar al gobierno que encabeza Nicolás Maduro.

Otra dimensión de la estrategia contra el “chavismo” consiste en una guerra que busca manipular a la opinión pública nacional e internacional, instalando premisas falsa que apelan a los sentimientos anticomunistas y que curiosamente calan hondo en autoproclamados izquierdistas.

Es sorprendente constatar que, desde connotados columnistas de la prensa hasta improvisados comentaristas de redes sociales, coinciden en análisis débiles y a mi juicio errados, cuyo pecado original es una pobre lectura de la historia social contemporánea de Latinoamérica y en particular de Venezuela.

Pocos elementos de juicio para la comprensión del fenómeno que acá se discute podrán tener quienes

no conozcan medianamente la historia de nuestro continente. Y es entre estas personas, que incluso se consideran de izquierdas, que se instalan los discursos que se pusieron en boga desde incluso antes que Hugo Chavéz accediera al poder en Venezuela mediante votación popular en comicios abiertos y transparentes. Discursos que se siguieron esgrimiendo durante los 15 años del proceso bolivariano, en donde el mismo supo ganar 18 de 19 contiendas electorales (Municipales, Legislativas, Presidenciales, referendos y plebiscitos)

Acusado de populista, autoritario, dictador, terrorista, antisemita y otros, los epítetos siguen sonando vacíos ante una escucha crítica y atenta, los mismos que prendieron cómo pasto seco sin mediar evidencia ni análisis entre los ya mentados comentaristas.

“Democracia” es  meramente un ruido en boca de muchos de quienes lanzan ácidas críticas al proceso venezolano. A pesar de la contundencia de los triunfos del “chavismo” en las urnas, “democracia” como concepto en la Revolución Bolivariana es mucho más profundo que lo que acostumbramos a atestiguar nosotros los chilenos cada cierto tiempo en que se nos consulta en qué autoridades queremos mandatar nuestro “poder soberano”. Una evidencia del llamado “poder popular” (que es la autogestión y la expresión más directa de democracia) es la complejidad de organización de la ciudadanía venezolana. Comités de diferentes caracteres abundan en cada cuadra de los barrios venezolanos. Más claro es cómo en 2002, ante un golpe de estado en curso, el pueblo venezolano salió a las calles a defender a su gobierno.

Pero nos es difícil esclarecer la realidad venezolana, si los supuestos expertos nos fuerzan a una mirada “desde arriba”. Los procesos sociales no pueden ser siempre entendidos desde las élites y de los “grandes hitos”.

El cierre de una estación de televisión venezolana encubre que incluso con los esfuerzos de democratizar la esfera comunicacional y que serían aplaudidos por cualquier sociedad, el 80% de las estaciones de televisión siguen siendo privadas y opositoras al gobierno.

Los acontecimientos en Venezuela y en Ucrania dan cuenta que el análisis desde una mirada del mundo polarizado que conocimos a la luz de la guerra fría, y que categorías que ya creíamos añejas cómo “imperialismo”, “colonia”, “metrópolis”, “oligarquía” y “lucha de clases”, son tan vigentes hoy como cuando el Dr. Salvador Allende denunciaba el flagrante intervencionismo de trasnacionales en la soberanía chilena.

No podemos entender la situación venezolana desde la mirada que en Latinoamérica existen instalados regímenes democráticos. Ello implica reconocer la estrecha concepción que la democracia se reduce al acto electoral y a la vez ignorar la asimetría que el estado latinoamericano garantiza a las oligarquías locales. Además, pasar por alto que dicha correlación de fuerzas que favorece a las familias más poderosas de cada país -en desmedro de los respectivos pueblos- y está totalmente supeditadas al imperialismo yanqui: oligarquías que en función de proteger sus privilegios y granjerías son capaces de vender la patria, ser sediciosos y derechamente golpistas.

Estas claves son imprescindibles para entender la dinámica política de nuestro continente.

En términos de regímenes políticos, lo que tenemos en el continente son oligarquías parlamentarias, La democracia supone una institucionalidad que tiende a corregir las asimetrías y a generar correlaciones de fuerza menos desiguales entre el capital y el trabajo, entre las minorías y las mayorías (étnicas, sexuales y cualquier tipo de diversidad que convive en una sociedad) y entre el pueblo y las élites. Pero lo que tenemos en Sudamérica es una institucionalidad que garantiza el orden social en el cual las élites concentran el poder económico, político y la hegemonía sobre los medios de comunicación.

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9 comentarios

  1. Su primer error Sr. Topaz es pretender que América Latina sea un continente monolítico. Le recuerdo que en la década de los 70, mientras en varios países del sur de nuestro continente estaban sometidos a férreas dictaduras militares, en Venezuela imperaba un perfectible pero muy funcional y auténtico sistema democrático. Desde ese sistema, Venezuela ayudó a los ciudadanos del sur a sobrevivir y a numerosos de ellos les dio asilo. Usted se deja llevar por la goebbleliana propaganda chavista que impuso varios mitos, por ejemplo que ganó 18 de 19 elecciones; eso NO es cierto, y pese al abuso de poder, al ventajismo y a las distintas formas de trampear, con las propias cifras del CNE, vemos que en por lo menos las últimas 7 elecciones, el chavismo NO ganó, todas esas elecciones muestran que en el «mejor de los casos», la población está divida en 2 mitades iguales; si las elecciones fueran justas, los resultados fueran distintos. Otro mito es que en Venezuela existe oligarquía, los amos del valle; pues no, la clase media fue un estrato fuerte y poderoso, que el chavismo ha ido destruyendo, para convertirse en una nueva clase social: le comento que hoy por hoy, hay un sector del chavismo que sí son una verdadera oligarquía. Tampoco el 80% de los medios de comunicación social están en manos de una rancia oligarquía; muy por el contrario, en estos momentos, de unos mil medios entre prensa escrita, emisoras de radio y televisión, más del 80% están en manos del gobierno transmitiendo un sólo mensaje, tal como en la Alemania nazi y la Cuba de los Castro; existen unas cuantas televisoras privadas pero controladas por el gobierno nacional; a los periódicos independientes se les niegan las divisas para comprar papel y las radios (no sólo se cerro un canal de TV, sino también más de 35 emisoras) también están sometidas. Los venezolanos nos enteramos de lo que ocurre a través de las redes sociales. Para opinar sería muy bueno que investigue bien, que realmente averigüe la realidad de Venezuela, y así no hace daño, opinando sobre lo que obviamente NO CONOCE

  2. Muy cierto es que Latinoámerica no es un continente monólitico y eso da lugares a muchas peculariedades del proceso bolivariano y paradojas en el clima actual; a saber que sean los ricos los que hacen las barricadas y los pobres defiendan al gobierno.

    1. No tienes la menor idea de lo que hablas. El único lugar de ricos que hacen barricadas es Altamira, pero no son los ricos los que las hacen. En el resto del país, las barricadas están por todos lados. Tú no estás en Venezuela y no sabes de qué hablas. Me animé a contestarte porque ustedes se disfrazan llamándose «El diario judío», pero eso sólo una máscara. Eso es WordPress, una página que financia el gobierno iraní para hacer pura propaganda. No me respondas, no me interesa lo que tengas que decir. Si hubiera sabido antes del vínculo con WordPress ni me molesto en leerte. Caí en una trampa «caza bobos», pero eso sólo funciona una vez. Hasta más nunca

  3. Agrego a tu comentario Beatriz, que actualmente en Venezuela casi no existe separación y autonomía del poder judicial de las decisiones del gobierno de Maduro; lo cual es un principio básico de un régimen democrático. Esto lo corroboran diferentes organizaciones de DDHH y últimamente lo hace patente la organización Proyecto Mundial de Justicia que elabora el Índice de Respeto al Estado de Derecho 2012-2013, en donde Venezuela ocupa el infausto puesto 95 de 97 países (solo siendo superado por Zimbabwe y Uzbekistán).

  4. Sr. Topaz
    acepto la premisa tan desgastado de que si uno no es comunista o socialista de la misma tintura cuando joven, no comprenderá al mundo y sus variantes políticas.
    TODOS los poderes absolutistas dejan un daño irreparable por el simple hecho de que fomentan el odio, las divisiones y al final, las libertades absolutas, no las relativas.
    y, con que derecho los jerarcas, instruídos por mentes externas, regalan la riqueza de todos los Venezolanos?
    O no puede ver que se está emparejando al pueblo para abajo no solo en ingresos sino también en educación abierta?
    O no ve que quienes mandan en Venezuela NO son Venezolanos?
    Quiero confiar en que pronto madurarás…..

  5. Topaz. http://www.aporrea.org/oposicion/n246979.html Yo trabajo con estas comunidades, del oeste de Caracas, que están organizadas en Comunas, que gerencia y gestiona sus localidades, muy al contrario de la clase media parasitaria que solo piensan en quemar cauchos y tumbar gobierno. No digo que en los barrios no haya opositores, pero no llega en el nivel de locura de la clase media caraqueña.

    Como venezolana me da orgullo los barrios porque en ejercicio del Poder Popular están asumiendo soberanía, que no es solo votar, sino participar y tomar decisiones sobre la política, en la planificación y en la vida del territorio nacional. Y viendo ese nivel de seriedad y de responsabilización con el país, me ha dado hasta vergüenza decir que vivo en el este, que formo parte de esa comunidad clase media desorganizada que, en comparación con los barrios, actúan como si estuvieran en la era medieval, cazando brujas para quemarlos en la hoguera.

    Gracias por este artículo.

    Saludos

  6. Mr. Topaz….. no te puedes atrever a hablar de Venezuela sin vivir esa realidad…. te invito a que te mudes a Venezuela, para ver cuánto duras allá… sobre todo si vas a Caracas, la cuál el régimen a convertido en la 2da ciudad más peligrosa de todo el mundo….

    No quiero entrar en detalles en mi respuesta, porque la mayoría de lo que leí me parecía un absurdo…. como por ejemplo, que el 80% de canales son privados…. PORQUE TE INFORMO QUE…. los medios privados se auto-censuran porque tienen miedo a ser cerrados, y los periodistas tienen miedo a ser perseguidos, torturados, etc. Pero, para que lo sepas, muchos periodistas han renunciado a esos canales porque no quieren vender sus ideales y pintar una realidad que no existe.

    Así que, te esperamos en Venezuela con los brazos abiertos!!!

    P.D. Trata de llegar sin reloj, sin teléfono, etc. y además, traete papel higiénico, harina, aceite… porque no vas a conseguir nada de eso en el supermercado.

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