Dañina intolerancia judía

por BENJAMIN SEGAL, Est. 4to Medio, Instituto Hebreo.

 

¿Quiénes somos para criticar a alguien que no cree en D’s y negarle su judaísmo? ¿Quiénes somos para criticar a alguien que no cree en las religiones o las encuentra absurdas y un mal invento? ¿Quiénes somos los no religiosos para criticar a una persona tan solo porque decidió usar una peluca y estar dispuesta a tapar parte de su cuerpo?

Las últimas columnas de El Diario Judío han estado llenas de polémica, donde la controversia se ve además inundada de descalificaciones entre judíos, creyentes o no, judíos según una sinagoga y según otra no, y tan solo porque respetan una idea o están en contra de lo que otro respeta, dándose la gana de hablar con un nivel de rabia gigante tan solo por el hecho de pensar distinto.

Hoy en día, no nos encontramos en posición de ponernos a discutir quién es judío y quién no, ni bajo qué ley o qué sinagoga ni bajo qué leyes. Seamos considerados, no podemos darnos el lujo de ponernos a discutir este tipo de cosas: no somos 300.000 judíos para que podamos criticarnos entre nosotros sin causarnos un profundo daño, sin que terminen asimilándose al no sentirse parte de esta religión.

Somos apenas 15.000 judíos. Cada vez somos menos, y son cosas como éstas las que hacen que nuestra comunidad esté desunida. No caigamos en estas discusiones que lo único que hacen es hacer que la gente tenga miedo y ganas de estar fuera no solo de nuestra religión sino que además de nuestra comunidad. No me puedo imaginar las críticas que recibimos de la gente que no es judía si ya entre nosotros nos criticamos a este nivel. No estamos para darnos ese capricho.

No sigamos con esto, ya que solo nos terminará perjudicando. No lo digo por cliché, hoy tenemos todos un trabajo en común y que es urgente para nosotros: luchar contra la asimilación de nuestra comunidad, pero no una de tipo exclusivamente religiosa, sino mucho más amplia, de cualquier tipo, de evitar que nuestros hermanos se alejen de participar de cualquier ámbito de nuestra colectividad.

Por eso todos, el que critica al creyente, el que critica al religioso, el que critica al que no cree en D’s o las religiones, el que critica a otros por su estilo de vida, acerquemos a todos nuestros javerim a nuestra comunidad y a todas sus instituciones, sea cual sea su orientación, porque hay un lugar en nuestra comunidad para todos nuestros miembros. Solo así podremos tener una comunidad judía por muchos años más. Luchemos juntos contra nuestras más grandes amenazas.

Publicaciones Similares

2 comentarios

  1. Benjamín, discrepo en varios de tus puntos y conceptos. Primero te limitas a hablar de judaísmo solo como una religión , entonces tu mismo estas dejando fuera a todos los judíos que no creen en d’s. Segundo, estudios de todo el mundo dicen que todos los judíos de la gola nos estamos asimilando cada vez más y que las únicas opciones para asegurar nuestras futuras generaciones son viviendo en Israel o siendo ortodoxos, entonces realmente, sólo por opinar de distintas formas estamos aumentando el riesgo de asimilarnos? Por decir esta mal que «una mujer use peluca» estamos fomentando a que gente se aleje de nuestra comunidad? No lo creo.
    De todos modos me gusto tu columna y más allá de pensar que dejar de discutir nos va a ayudar a combatir la asimilación, es un lindo mensaje para todos, cristianos, judíos, musulmanes, fascistas, comunistas, etc. Un mensaje el cual habla de la tolerancia, el de respetar al otro por el simple hecho de que es un ser humano al igual que yo.

  2. Discutir no tiene nada de malo cuando se hace en un tono de respeto y con un fin productivo. Descalificar y atacar al otro es el ptroblema. El odio gratuito es el problema. Pero no creo que tenga que dejar de haber debate, ya que ayuda a que la gente piensa, clarifique su posicion, vea otras posiciones y pueda crezer. Eso si, tiene que ser con respeto.

    Es más, tu dices que debemos «luchar contra la asimilación de nuestra comunidad». Para eso tienes que entender quien es judío, que se llama asimilarse, qué es la comunidad, por qué es importante luchar contra la asimilación, etc.

    Por lo tanto el problema sería descalificar al otro, pero es bueno que hayan discuciones de los temas. Como bien dijiste, «Luchemos juntos contra nuestras más grandes amenazas», y la más grande de ellas es nuestra ignorancia.

Responder a Daniel Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *