5 Broken Cameras: palestinos nominados al Oscar

por RAFAEL GUENDELMAN, Lic. en Artes Visuales, PU. Católica. Diplomado en Teoría del Cine, PUC.

La semana pasada dieron en Fidocs (Festival internacional de documentales de Santiago) “5 Broken Cameras”, la película palestina que fue nominada al Oscar como mejor filme documental del año.

“5 Broken Cameras” narra desde el punto de vista de Emad Burnat el movimiento social que surge en el pueblo de Bil’in, como oposición a la construcción del muro y de la última parte del asentamiento de Modi’in Illit: Mattityahu Este. Las viviendas y el muro se planean construir sobre terrenos que pertenecían a la aldea.

La película muestra a partir de un montaje más bien tradicional, pero inteligente y dinámico, el transcurso de 5 años en la aldea, desde las mediciones de ingenieros para la construcción del muro, hasta las últimas protestas realizadas por los manifestantes. En un relato paralelo, vamos viendo el crecimiento, desde su nacimiento, de Gibreel, último hijo de Emad, quien a medida que va creciendo, va también entendiendo el contexto en el que vive. El niño sirve como un elemento neutro, que en sus deambulaciones e interrogantes, se diferencia ante las masas llenas de convicciones que lo rodean.

Al ser una película grabada por un sujeto amateur, quién ve en su obsesión por grabar, “la forma de sanar sus heridas y no olvidar lo sucedido”, las tomas se sienten cercanas, desprolijas y profundamente intensas, a pesar de que a veces se intenta hacer digerible el relato, mediante la música incidental y una edición más bien clásica, a mi juicio, a veces innecesaria.

La historia es particular y se sitúa desde la subjetividad. En ningún momento pretende realizar una exposición objetiva y/o panorámica de los hechos. Es posible ver, por ejemplo, desde el punto de vista de Gibreel, el cómo se va generando el sentimiento de rechazo hacia los colonos, y finalmente, hacia los soldados. La película es parcial y transparente. Esto último se agradece ante tantos documentales que tratan el conflicto con ansias de dar una verdad objetiva, que traslucen al poco rato de ver, la ingenuidad y el panfleto de una u otra posición.

Finalmente, vamos yendo más allá de la construcción cinematográfica y nos adentramos en el tema que expone. La historia adquiere un valor importante en la medida que presenta una situación de menor impacto medial que Gaza, pero tan actual y relevante como ésta, para una posible solución de paz.

Como interrogante, y sabiendo que las protestas de los viernes iniciadas en Bil’in, registradas en este documental, son hoy ejercicios casi de rutina entre los jóvenes palestinos, activistas israelitas y la IDF, en diferentes pueblos palestinos, es necesario evaluar su real impacto en la solución del conflicto, al menos en la Cisjordania.

Los asentamientos se siguen construyendo y la Autoridad Palestina no ha sido capaz de cristalizar, en medidas pragmáticas, un importante movimiento social que nació desde la gente. A pesar que el movimiento social es un apoyo simbólico y psicológico a las demandas, hoy están siendo cada vez más urgentes medidas reales de apoyo a un conflicto que cada vez se solidifica más.

Publicaciones Similares

3 comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *