|

Un Horizonte Cuadrado

por ILAN OXMAN, Antropólogo Social. Acróbata aéreo y Paracaidista.

 

No hay nada que iguale un viaje de trabajo que te de placer. Este fue el afortunado caso durante la gira que realicé con una compañía de circo profesional durante el 2010, trabajando en festivales y teatros de Santiago y Lima en Sudamérica, Reus, Valladolid y Salamanca en España, Potsdam y Karlsruhe en Alemania, Poznan en Polonia y finalmente Monthelon al sur de Francia.

Simplemente aún me cuesta creer el hecho de haber tenido esta experiencia, uno de los mejores viajes que he tenido en mi vida en gira circense….

Desde la enseñanza media comencé a entrenar acrobacia aérea, especializándome en telas y trapecio, lo que me abrió la oportunidad de trabajar en la Compañía de Paso junto a un elenco profesional de trapecistas. Con este grupo, y bajo la dirección del coreógrafo Suizo Ueli Hirzel, compusimos una obra completamente suspendida donde transitamos por el ciclo vital.

En octubre del 2009 me incorporé a esta Cía. reemplazando a un trapecista y de inmediato comenzamos a ensayar para las fechas que tendríamos durante el 2010 en Santiago, Lima y varios festivales de Europa. Ya en diciembre del 2009 tuvimos algunas fechas del espectáculo en el Circo del Mundo y el Parque Quinta Normal, con una comprometida asistencia de público aunque escasa convocatoria por parte de los organizadores.

Ya en abril partimos a Lima, Perú para participar del Festival Internacional del Círculo organizado por la escuela profesional de Circo La Tarumba. El concepto del festival es la integración latinoamericana a través del arte por lo que, como excepción a la regla, los organizadores invitan a las compañías a quedarse en Lima durante la semana completa. Durante este período, están programadas las fechas del espectáculo junto a talleres/conversatorios y una serie de actividades complementarias, cenas, visitas turísticas y tiempo para entrenar. Pocas veces me he sentido tan agasajado en mi vida.

Podríamos decir que la pauta del festival estuvo dada por las cenas y almuerzos que tuvimos, los que comenzaron desde que llegamos y se sucedieron uno tras otro hasta que habíamos probado la alta cocina peruana en restaurantes de vanguardia, comida chifa, fondos de regimiento llenos de ají de gallina y tantas otras sabrosuras. En los tiempos libres que nos quedaban nos dedicamos a preparar nuestro espectáculo, compartir con los acróbatas y conocer un poco de la ciudad, la cual nos recibió con mucho cariño y pudimos dar un muy buen espectáculo.

Tras eso volvimos a Chile por 1 semana para luego irnos rumbo a Europa. Antes de ir a Reus en España tuvimos que ir a Francia ya que el director Suizo, Uli para los cercanos, vive en un castillo al sur de Francia. Sí, un castillo. Ahí guardamos la estructura junto a todo el material y luego lo transportamos en un camión cerrado de 12 metros hasta nuestro primer festival en España. Reus es una ciudad que llama la atención de inmediato por ser la cuna del destacado arquitecto y diseñador Antoni Gaudí. Las pequeñas calles y pasajes que describen la ciudad estaban llenas de pequeños y grandes espectáculos circenses, desde intervenciones callejeras interactivas con una serie de juguetes ambientados en la estética circense a los más elaborados espectáculos encarpados y al aire libre. La ciudad vibraba con circo y compañías de todos los continentes.

Nosotros tuvimos el privilegio de inaugurar el festival, actuando a las 8 pm en la plaza mayor de la ciudad. Aún recuerdo el asombro y contraste que me produjo con nuestras experiencias previas en Santiago el momento en que tras salir de nuestro camarín y tomar una de las pequeñas calles que llegaban a la plaza, vimos alrededor de 4.500 personas que esperaban el inicio del espectáculo. En ese mismo momento y con risas nerviosas, todos sentimos como la adrenalina corría por nuestros cuerpos. Tuvimos una increíble función que se repitió por los siguientes 3 días a foro lleno, y entremedio por supuesto, que aprovechamos de probar las delicias de la comida catalana, entrenar, conocer algunas de las maravillas de Gaudí y disfrutar del festival y los miles de espectáculos que estaban repartidos por la ciudad.

Aún recuerdo una de las historias más simples y emocionantes que he visto en mi vida, con Volchok del Cirque Trottola donde se narraban los desencuentros de un puerto y sus personajes, especies de marineros punk que con simpleza poética realizaban increíbles habilidades. Hay 2 que aún me dan vuelta en la retina: la primera es cuando la chica era pasada a llevar con el escobillón por el hombre del aseo, lo que terminaba con ella haciendo paradas de mano sobre la escoba mientras el hombre seguía haciendo el aseo. La segunda es cuando este mismo hombre del aseo comenzaba a rememorar a su amada, de quien encontraba un liviano vestido de seda montado sobre un colgador con un palo. Todo terminaba con el hombre bailando con un vestido flotante que se equilibraba sobre el escobillón. Acá una imagen del escobillón.

Les dejo un link con el video de nuestro espectáculo: http://youtu.be/jTvCBAGGL7M

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *