F5: La sociedad de lo actual, inmediato, viral y tecnológico. El mundo del olvido, el fin de la historia.

por IGNACIO PÉREZ, Est. Ingeniería Civil, U. de Chile. Vaada Jinuj, Hashomer Hatzair.

La actualidad nunca había sido tan actual, es algo que podemos decir sin ingenuidad. Desde la invención de la pantalla, las comunicaciones han sufrido una evolución exponencial en reducir la distancia temporal entre el hecho y su comunicación, con el internet y la socialización del celular con cámara como factores fundamentales de esta transición de era.

Un evento cualquiera es capturado y puesta en marcha su viralización por la red antes siquiera que uno alcance a formular las palabras para narrativizarlo. Muchas veces nuestros amigos prefieren mostrarnos un video antes que contarnos la historia que le dio origen. La letra impresa pierde actualidad, es obsoleta, no está al ritmo de las imágenes que viajan por el aire y el espacio.

La tecnología hace posible la relación directa del usuario de la pantalla con el presente que ahí ve plasmado, sin la distancia que obliga la mediación de un texto, de un guión, de una narración, o sea, de la elaboración de aquel presente, elaboración que lo salve de su mera condición de hecho. Alguien que vive en un presente constante no es capaz de pensar en aquello que no esté ahí, es decir el pasado y el futuro; aun cuando el dispositivo que lo ciega es el mismo que le provee de imágenes de todos los tiempos. Hablamos de un sujeto ahistórico, aunque sin irnos por las ramas de esta visión extrema, podemos entender por qué la actual juventud adolece de un pensamiento a largo plazo, de la promesa que se vuelve certeza de que hasta los sistemas más sólidos pueden cambiar.

La alta definición, el fenómeno HD, hace aun más difuso el panorama, donde las imágenes, que parecieran provenir de una realidad donde las cosas se ven mejor y más reales, como si ni siquiera mediara el ojo entre ellas y nosotros, producen esta ilusión de atemporalidad, como si existiesen fuera de todo contexto.

La actualidad nunca había sido tan actual, las redes sociales son más influyentes que los medios masivos tradicionales, el tráfico de información es mucho mayor y mucho más veloz que el pensamiento, nos estamos pisando los talones a nosotros mismos. La pantalla se impone rápidamente como fuente de la verdad, registro total y constantemente actualizado, el mundo de la actualidad constante, el mundo del olvido.

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *